Me ocurre con frecuencia. Típico, conoces al amigo de un amigo y tomáis algo juntos. Entonces descubro su historia y pienso: «qué rabia, ¿por qué no está llegando a más gente?«
Entonces le digo:
Ayudo a todas esas personas que no se creen capaces. Superan sus bloqueos frente a una audiencia o a cámara y llevan su gran idea hasta su público siendo ellos mismos.
Estoy segura de que tú también eres como ese amigo de mi amigo.
Delante de una cámara o cara a cara para hablarte de la importancia de una comunicación cautivadora. O de emprendimiento desde la autoestima, el liderazgo y la acción. O sobre cómo convertir un producto o evento en una experiencia memorable.
Porque descubrí que si para mí no siempre ha sido fácil, para otros puede ser como conducir con el freno de mano echado. Y eso que yo llevo toda la vida.
¿Toda la vida? Así comienza esta historia…
Al principio de mi carrera en televisión imitaba a otros reporteros. Hasta que un compañero me dijo que si descubría quién era yo frente a la cámara mejoraría.
Seguir su consejo me hizo fluir y entonces saltaron las chispas: comencé a llegar a la audiencia. Fue como crecer unos centímetros y…
La conexión se disparó. Eso que sucede cuando muestras de lo que eres capaz.
Y tú, ¿quién eres frente a la cámara?
Y es que no por haber hecho TV nací sabiendo. Ahora, volviendo la mirada atrás, sé qué ocurrió.
Me centré más en “cómo quedaría yo ante la cámara” que en “cómo transmitir el mensaje para llegar a la gente”.
Hoy, además de saber comunicar de forma genuina y efectiva, disfruto.
He entendido que la fuerza está en cómo transmitir tu mensaje para impactar en tu audiencia. Que los importantes son ellos, o tú si me estás escuchando.
Ahora me sale bien a la primera, de forma automática.
Si yo pude, tú también.
Ya seas emprendedor o empresario, freelance, infoproductor o profesional de cualquier sector: revélate, mejora tus habilidades de comunicación.
Recupera tu valía como experto. Desbloquéate y extrae lo mejor de ti. Exponte como solo tú lo harías.
Deja huella en más personas, y hazlo de verdad. No a esos que no son tu público… o a nadie.
Potencia tu prestigio e influencia y marca la diferencia. Que vean en ti lo que eres: un referente en el que se puede confiar.
Inspira con tu mensaje y crea una verdadera comunidad. Que nadie abandone la sala, que tus ponencias compitan con la última serie de éxito en Netflix.
Crea una vivencia única y genuina en cada evento, webinar o taller, online o presencial. Huye del simple entretenimiento o de contenidos difíciles de digerir.
No formes, transforma. Genera resultados reales en los clientes, alumnos o pacientes a los que ayudas. Y deja tu legado.
Fideliza a tus clientes con honestidad y a largo plazo. Huye de la venta puntual, haz que repitan y conviértelos en embajadores de tu proyecto.
Permanece en el recuerdo de tu audiencia. Logra un Top of Mind para tu marca.
Potencia tus acciones de marketing con menos inversión y más conexión.
Haz que lleguen a ti más y mejores clientes sin vender de forma agresiva o invasiva.
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